Hemos llegado a comprender los beneficios potenciales y a valorar la posibilidad de hacer fijaciones para disminuir el riesgo de subidas de precios y, por tanto, los costes asociados al suministro. Nos informamos sobre los mercados, cómo se mueven los precios y por qué.
Pero seguimos sin entender por qué el precio de fijación que nos ofrece el proveedor es tan diferente del que se encuentra en el mercado mayorista y en todas las newsletters que circulan semanalmente. ¿Por qué?
Cuando se solicita una fijación, los proveedores deben hacer valoraciones que les permitan, por un lado, ofrecer al cliente un precio competitivo y, por otro, cubrirse adecuadamente en el mercado mayorista. Por esta razón, algunos elementos relativamente estándar están incluidos en el presupuesto:
- Perfil de consumo/coste de la materia prima
- Perfil de riesgo
- Riesgo de volumen
- Costes financieros de la cobertura
- Margen
¿Cuál es la relación entre el perfil de consumo y el precio de fijación?
Como sabemos, los precios mayoristas de la electricidad y el gas natural, que pueden consultarse en las páginas web de los mercados y que se expresan en €/MWh tanto para el gas como para la electricidad, se refieren a productos estándar por duración (calendario, trimestre, mes) y perfil (carga base/pico/falta de carga para la electricidad y carga base para el gas). Esto significa que estos precios son válidos como referencia para cantidades fijas, todos los días/todas las horas del periodo considerado.
En resumen, si mi perfil de consumo fuera de 1 MWh en todas las épocas del año, el precio de fijación podría estar muy cerca del precio de carga base del mercado mayorista. Pero mi perfil no es así, por desgracia, y ¿entonces qué?
Para cotizar la fijación, el precio del producto al por mayor debe ser reproporcionado y ajustado para seguir la configuración de mi perfil. Cuanto más constante sea el perfil con el que consumo a lo largo de los distintos días y horas, más podrá acercarse la oferta del proveedor al precio del producto estándar de carga base. Cuanto más variable sea mi perfil, más lejos estará.
El proveedor que analice el perfil, por tanto, debe valorar correctamente tanto la forma del perfil dentro del día/semana, como la forma en que varía el perfil durante el periodo (mes/trimestre/año) para el que he solicitado la fijación.
Por tanto, el proveedor debe estimar un coeficiente corrector que tenga en cuenta la forma de mi perfil, es decir, cuánto consumo y en qué horas/días, para reproporcionar el precio del producto de carga base y ofrecerme una cotización competitiva. Si mi consumo se concentra en las horas centrales del día o en los días laborables, cuando la energía/el gas son más caros, la empresa suministradora tendrá sin duda que ajustar al alza el precio de la carga base.
En cambio, si consumo principalmente por la noche o los fines de semana, cuando la electricidad y el gas suelen ser más baratos, el precio será menor.
Además, si mi perfil de consumo varía mucho a lo largo del mes/trimestre/año, por ejemplo si consumo a plena carga durante una semana y a la siguiente consumo un 50% menos, el proveedor tendrá que tener en cuenta esta variabilidad a la hora de hacer el presupuesto.
Todo esto se incluye en el precio de la parte relativa al "perfil" y, obviamente, esta cuota de "coste de la materia prima" es la más relevante entre los elementos que se cotizan en la fijación. Precisamente esta partida podría, si se explicitara, compararse con el precio del mercado mayorista.
¿Qué es el riesgo de perfil y cómo influye en el precio de fijación?
El proveedor también debe tener en cuenta el riesgo de que mi consumo real tenga una distribución diferente (a lo largo de las horas/días) en comparación con lo presupuestado.
Por tanto, hay que estimar la posible variación del consumo y el consiguiente coste para el proveedor.
Obviamente, el proveedor no puede predecir el futuro ni saber con certeza cuánto cambiará la forma de mi perfil en el momento del consumo y, por tanto, sólo puede hacer una estimación aproximada del riesgo del perfil.
En esta estimación, el proveedor suele tener en cuenta el efecto cartera, es decir, el hecho de que el riesgo de perfil derivado de un solo cliente se diluye dentro de la cartera agregada compuesta por todos los clientes a los que sirve el proveedor: cuando, en una hora o en un día, un cliente consume un poco más, otro probablemente consuma un poco menos.
De este modo, la parte del riesgo del perfil que se incluye en la oferta del proveedor es mucho menor de lo que sería si sólo se tuviera en cuenta el perfil del cliente.
¿Cómo influye el riesgo de volumen en el precio de fijación?
Otro elemento que se estima en la cotización es la posible variación de los volúmenes totales consumidos durante el periodo.
Si mi perfil indica que consumo 100 en marzo, es probable que durante el mes de consumo, la cantidad de electricidad o gas realmente extraída de la red sea un poco más (105) o un poco menos (95).
Esta posible variación del total consumido con respecto al perfil previsto se denomina riesgo de volumen y es otro aspecto que debe ser tarifado por el proveedor dentro de la fijación.
Además, en este caso, el proveedor suele tener en cuenta el efecto cartera y, por tanto, el coste que se incluye en el presupuesto es inferior al que tendría si yo fuera el único cliente del proveedor.
¿Qué costes se añaden para el presupuesto de la fijación?
Cuando se confirma una fijación, el proveedor tiende a cubrir el riesgo de precio comprando un producto estándar en el mercado mayorista para "bloquear" el desajuste entre los ingresos derivados de la electricidad o el gas que ha vendido a un precio fijo (tras la fijación) y el coste de compra de la materia prima. Para realizar la cobertura, el proveedor incurre a su vez en costes: coste de acceso al mercado mayorista, coste de las garantías financieras necesarias para la cobertura, coste de la transacción, etc.
Una pequeña parte de estos costes se repercute en el presupuesto de fijación precisamente para cubrir los gastos de funcionamiento del proveedor.
¿Cuál es el margen del proveedor?
Al precio de fijación se le añade una pequeña tasa para remunerar al proveedor y el servicio de fijación que ofrece. En este caso, es fácil de entender, cada proveedor aplica un margen de beneficio de su elección. No obstante, hay que tener en cuenta que, en general, el margen de beneficio del proveedor no es demasiado llamativo, ya que, de lo contrario, el precio ofrecido está fuera del mercado.
En conclusión, el presupuesto de fijación que hace el proveedor apenas puede ser desgranado para entender cuánto se ha cotizado por cada uno de los puntos anteriores.
Por eso, comparar el precio de fijación con el precio del mercado mayorista es un poco engorroso. Eso no quiere decir que el mercado mayorista sea algo que no haya que seguir, ¡al contrario! Informarse y analizar el mercado mayorista, las noticias y, en general, la tendencia de los precios es muy útil para entender qué está pasando, qué escenarios pueden darse y, en definitiva, para valorar cuándo es el mejor momento para solicitar una fijación.